Las ventajas y los riesgos de comprar una vivienda a una cooperativa.
Una cooperativa de viviendas es una fórmula inmobiliaria que permite adquirir una casa nueva de una forma mucho más barata (en torno al 20% o incluso más). Con el fin de conseguir la vivienda a precio de coste, los cooperativistas se encargan de todo el proceso, desde la compra del suelo hasta la construcción del inmueble. Al convertirse en autopromotores y no tener que pagar a otra empresa, la casa resulta más más barata.
Cómo funciona una cooperativa
1. Constitución. Un grupo de personas se une para formar una cooperativa aportando los ahorros de cada uno. Elige un cosejo rector. Esta cooperativa compra un terreno y sobre él, contrata a una constructora y edifica un edificio de viviendas. Hay que tener claro que los cooperativistas se convierten en empresarios promotores.
2. Gestora. La cooperativa contrata los servicios de una sociedad gestora, quien se encarga de mantener informados a los cooperativistas, de administrar los fondos y de gestionar la obra. Vigila y se obliga a cumplir los aspectos administrativos, jurídicos y técnicos de la promoción, desde los permisos, las licencias hasta la conversación de la cooperativa hasta la Comunidad de Propietarios.
3. Promotora-gestora. En muchos casos, quien está detrás de una gestora es una promotora inmobiliaria. La razón es que con ello consigue que los fondos para financiar una obra los pongan los cooperativistas por adelantado. Las ventajas para los cooperativistas es que una promotora-gestora cuenta con experiencia y sabe tratar con las constructoras, para conseguir mejores precios.
4. Fin. Una vez construida la vivienda, la cooperativa se disuelve y se da paso a la entrega de las llaves y la escrituración de la propiedad. A partir de ese momento se convierte en una comunidad de propietarios regida por la ley.
5. Crédito hipotecario. Con la escritura de la propiedad, también se firma el crédito hipotecario. Los cooperativistas han pagado una parte del coste del piso, entre el 20 y el 30%, y ahora el banco pone el resto. Si no tienes ese 20 o 30% en CreditOkey disponemos de un producto exclusivo para nuestros clientes y así no perder la oportunidad a optar al piso de tus sueños y más barato!!!. El cooperativista, como cualquier crédito hipotecario, lo irá pagando al banco en cuotas a lo largo de los años.
Ventajas
1. Más barato
El ahorro puede llegar al 20 0 30% de una vivienda en compra-venta libre porque no hay promotor. Además los gastos de gestión, notarías, registro… suelen ser menores que los derivados de una compra directa.
2. A gusto
El ccoperativista puede ir eligiendo los materiales y las calidades.
3. Diseño
El cooperativista puede cambiar el diseño de la planta de su vivienda (en la medida de lo posible). añadiendo separaciones, quitando puertas o ampliando estancias.
4. Decisiones
Las decisiones importantes se toman en asambleas en las que todos los votos son iguales. Se toman a por mayoría a mano alzada.
5. Salida
Un cooperativista puede salirse de la cooperativa y exigir la devolución de las cantidades aportadas. Sus derechos se ofrecen primero a otros cooperativistas. Si en dos meses no hay interés interno, entonces se ofrece a personas externas a la cooperativa.
6. Seguro
En caso de que la constructora no entregue las viviendas en el plazo acordado, exite una compañía de seguros que cubre las aportaciones de los cooperativistas.
Los inconvenientes
1. Adelanto
Los cooperativistas deben adelantar el dinero para realizar la obra. Si no tienes ese 20 o 30% en CreditOkey disponemos de un producto exclusivo para recibir ese importe y no perder la oportunidad de comprar ese piso más barato.
2. Sin licencia de obras
La ley exige que antes de que se forme una cooperativa, debe existir una licencia de obras.
3. Plazos más largos
La cooperativa pacta con la constructora unos plazos de entrega de la vivienda, que se pueden retrasar debido a mil causas.
5. Fondos escasos
Sea por un error de cálculo o porque han aparecido gastos no contemplados en el proyecto inicial, la cooperativa puede quedarse corta de fondos. En ese caso, los cooperativistas tienen que rascarse los bolsillos.
Unos consejos
Informarse si está afiliada a alguna federación o unión regional
Investigar la evolución histórica de la gestora.
Asistir a todas las asambleas y exponer tus dudas
Conocer los derechos y deberes de los cooperativistas
Investigar si el proyecto tiene seguro especializaco en cubrir las promociones de viviendas
Hablar con un intermediario financiero, de confianza, para formalizar la financiación